El portavoz del Kremlin, Dmitri Peskov, confirmó este miércoles que sigue vigente la tregua de 72 horas ordenada por el presidente ruso, Vladímir Putin, con motivo del 80 aniversario de la victoria del Ejército Rojo sobre la Alemania nazi y el Tercer Reich.

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La medida, que comenzará a las 00H00 hora local de este 8 de mayo y se extenderá hasta el día 11, fue calificada por el Gobierno ruso como un gesto humanitario.

Peskov acusó a Ucrania de mantener acciones terroristas y aseguró que los servicios especiales de su país garantizarán la seguridad durante las celebraciones en la Plaza Roja este 9 de mayo.

«Nuestros servicios especiales militares están tomando todas las medidas necesarias para que la celebración de la Gran Victoria tenga lugar en un ambiente tranquilo, estable y pacífico», afirmó.

El vocero del Kremlin advirtió el martes “si Kiev continúa atacando nuestro territorio, daremos una respuesta adecuada”.

Por su parte, el líder del régimen de Kiev, Volodímir Zelenski, rechazó la iniciativa rusa, la cual calificó como «un intento de manipulación», y exigió en cambio un cese al fuego de al menos 30 días para verificar su cumplimiento.

Zelenski también amenazó a los asistentes al desfile en Moscú. «Para todos los países que han viajado o viajan para el 9 de mayo, nuestra postura es muy sencilla: no podemos hacernos responsables de lo que ocurra en el territorio de la Federación de Rusia. Ellos les proporcionan seguridad y, por tanto, no les daremos ninguna garantía«.

En tanto, el Kremlin descartó la viabilidad de la propuesta ucraniana y resaltó que no es posible declarar un alto al fuego de 30 días sin resolver algunas cuestiones clave del conflicto.

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